Lo que tienes que tener en cuenta si estás embarazada en verano
Si estás embarazada en verano, el aumento de las temperaturas te puede acabar pasando factura. Por ello es imprescindible que tomes las precauciones necesarias para protegerte a ti y a tu bebé y que evites los riesgos derivados del calor.
Exposición solar
Durante el embarazo la melanina es más activa provocando que tu piel sea más propensa a que aparezcan manchas oscuras. Uiliza un buen fotoprotector solar y utiliza una gorra o sombrero para protegerte la cara.
Si vas a ir a la playa o cualquier otro lugar donde estés expuesta directamente al sol, a parte de una buena sombrilla, utiliza cremas con una protección muy alta, recuerda aplicártela cada 2 horas.
Altas temperaturas
Durante el embarazo es normal sentirse peor con las altas temperaturas. Las embarazadas perciben el calor con mucha más intensidad por lo que un calor excesivo puede resultar perjudicial para el bebé.
La deshidratación durante el embarazo puede provocar desmayos, infecciones de orina e incluso contracciones.
Procura no salir en las horas más intensas de calor y beber al menos 2.5 litros de agua diarios para mantener un buen nivel de hidratación.
Evita saunas y otros lugares donde las temperaturas sean altas.
Utiliza ropa cómoda y fresca, así como un calzado cómodo y abierto que no oprima la circulación para evitar que se te hinchen los pies.
Deporte
Aunque el deporte durante el embarazo está aconsejado, en verano, lo que tienes que tener en cuenta es que realizarlo al aire libre puede tener riesgos.
Evita el ejercicio durante las horas centrales del día. Puedes optar por la natación que es el deporte más indicado en verano para embarazadas.