Hipérico o Hierba de San Juan: propiedades, toxicidad y cómo utilizarlo
El hipérico o hierba de San Juan (Hypericum Perforatum) es una planta medicinal muy popular gracias a sus propiedades cicatrizantes y antidepresivas. Se trata de una pequeña planta herbácea, de entre 50-90cm de altura, que crece en Europa, concretamente en lugares secos y soleados como bordes de caminos, huertos…
Historia del Hipérico
El hipérico es una planta perenne ya conocida desde tiempos remotos. Su nombre proviene del griego «Hyperikon», que significa «Por encima de la imaginación», o bien, «El Superior» debido a que nuestros antiguos ya consideraban que las propiedades de esta planta estaban por encima de todo.
Hipócrates lo recomandaba como un remedio antiinflamatorio para el tratamiento de contusiones, dolores artrósicos, neurálgicos y otros procesos dolorosos. De hecho, durante siglos se la consideró una planta mágica con las propiedades de alejar a los espíritus y proteger de los rayos. Esta creencia tiene su origen en que el hipérico florecía en la noche de San Juan, justo coincidiendo con el solsticio de verano.
De ahí viene el nombre popular más conocido de esta planta, Hierba de San Juan, haciendo alusión al hecho de que esta planta se encuentra en plena floración el día de San Juan, siendo el 24 de junio, el día del año en el que sus principios activos son más elevados.
El hipérico también se encuentra presente en las obras de Plinio y Dioscórides como remedio para un sinfín de males somáticos y psíquicos. El emperador Nerón lo utilizaba como antídoto, los pueblos germánicos siempre lo han tenido muy presente debido a que practicaban culto al solsticio y la consideraban una planta portadora de luz capaz de expulsar demonios, pero fue en la Edad Media cuando la Hierba de San Juan alcanzó un gran protagonismo.
Su paso por toda nuestra historia le ha otorgado un sinfín de nombres. De hecho, es una de las plantas medicinales con más nombres populares que existen, ya que al hipérico lo podemos encontrar también con los nombres de Hierba de San Juan, Espantadiablos, Corazoncillo, Hierba de las Heridas, Rosa de San Juan, Hierba Soldado, Hierba Militar…
Características botánicas del Hipérico o Hierba de San Juan
El hipérico pertenece a la familia de las hipericáceas. Es una planta vivaz, de raíces leñosas de un color pardo amarillento y poco ramificadas. De tallos rojizos, la hierba de San Juan puede alcanzar entre 50-80cm de altura.
Sus flores son de un color amarillo oro. Las corolas, asimétricosas y con cinco pétalos, están llenas de bolsas secretoras. Posee un olor aromático, balsámico y frágil y su sabor es amargo.
Florece entre mayo y septiembre, y su fruto está dividido en tres cámaras que son las guardianas de un gran número de semillas. Al machacar o triturar sus flores, se obtiene un jugo color rojizo que mancha los dedos de un color azul violáceo.
Esta planta es originaria de las regiones templadas de Europa, Asia occidental y África del norte. La podemos encontrar en terrenos calcáreos y rocosos expuestos al sol hasta 2000 metros de altitud (baldíos, matorrales, praderas, zonas boscosas, márgenes de caminos…)
¿Para qué se utiliza el hipérico actualmente?
Del hipérico, en la actualidad se utilizan los extractos alcohólicos u oleosos, así como diluciones homeopáticas.
El extracto natural u orgánico de hipérico se obtiene a partir de los brotes y de las flores de la planta fresca, proveniente de cultivos biológicos controlados. La cosecha se realiza antes de que la flor se abra.
Al recolectar solo la planta fresca se obtienen unos niveles muy elevados de hipericina, su principio activo más destacado y muy utilizado actualmente como fármaco antidepresivo, especialmente para casos de depresión moderada.
Se cree que la hipericina actúa como un antibiótico e inhibidor no selectivo de la cinasa (enzima esencial para numerosos procesos celulares). También puede inhibir la acción de la dopamina, elevando sus niveles. De ahí, que encontremos en esta planta un excelente tratamiento contra la depresión.
Propiedades medicinales del Hipérico
Si hablamos de la depresión, el hipérico es la planta que más destaca actualmente como tratamiento natural de la depresión, ansiedad e incluso para el insomnio.
Se trata de una de las plantas más investigadas y estudiadas por la comunidad científica. Como remedio antidepresivo se administra para la depresión, ansiedad, irritabilidad, insomnio, fatiga nerviosa, síndrome de Burnout, vaginismo… siendo adecuada también para el tratamiento de la depresión estacional (depresión de otoño) y otros síntomas que ésta presenta tales como el cansancio, duelo, apatía, tristeza, etc.
Los efectos del hipérico sobre nuestro organismo son similares al efecto de los fármacos sintéticos que tenemos disponibles para el tratamiento de esta enfermedad pero con la ventaja de que no presenta todos los inconvenientes de estos fármacos.
Hipericina, el principio antidepresivo de la Hierba de San Juan
Como hemos mencionado anteriormente, es la hipericina la responsable de sus propiedades antidepresivas. Este principio activo actúa bloqueando la absorción de neurotransmisores como la serotonina, la dopamina y la noradrenalina, prolongando los efectos de bienestar que estos neurotransmisores proporcionan.
La ciencia además, ha podido constatar que esta planta ofrece un efecto sinérgico de todos sus principios activos (hiperforina, hipericina y flavonoides) contra la depresión.
Hiperico como tónico para el sistema nervioso
El hipérico también se utiliza habitualmente como tónico nervioso con el objetivo de mejorar la memoria y la capacidad cognitiva en general. También para tratar episodios de estrés o depresión leve.
En definitiva, tenemos a nuestro alcance una planta que nos proporciona felicidad y bienestar, fortaleciendo nuestro sistema nervioso y contribuyendo a conseguir un buen balance emocional.
La hierba de San Juan es beneficiosa en casos de astenia, apatía y otros síntomas que acompañan a los cambios de estación y a diferencia de otros tratamientos sedantes, el hipérico no tiene efectos negativos sobre la salud por acumulación de toxinas en sangre.
Hipérico para la curacion de heridas
Su alto contenido en taninos hace que esta planta sea desde la antigüedad uno de los mejores cicatrizantes en caso de cortes, heridas, quemaduras, mordeduras de serpientes, llagas en los pies o manos…
Su uso como cicatrizante tiene su origen en la Edad Media, estando a día de hoy muy extendido. Para este fin, se debe aplicar en forma de emplastre o mediante infusiones. El aceite vegetal de hipérico no es muy adecuado como cicatrizante pero simplemente porque solo se pueden obtener sus taninos a través de infusiones.
En caso de gingivitis, el hipérico es altamente eficaz tomándolo haciendo gargarismos mediante enjuagues bucales entre 2-3 veces al día.
Aceite de Hipérico para la piel y el dolor
El aceite vegetal de hipérico se obtiene a través de la maceración de sus flores en un aceite base.
Posee propiedades cicatrizantes, antisépticas, antibacterianas, antiherpéticas y antiinflamatorias que se aprovechan para tratar picaduras de insectos y otras muchas afecciones cutáneas como las llagas producidas por los herpes.
En cuanto al tratamiento del dolor, el aceite vegetal de hipérico, cuenta con numerosas referencias bibliográficas que hablan del uso de esta planta como remedio para los dolores musculares o mialgias (reumatismo, dolor de espalda, lumbago, ciática o dolores articulares).
También se utiliza como aceite de masaje en casos de esguinces y fracturas, gracias a sus propiedades analgésicas y calmantes.
Aceite de Hipérico: Propiedades Cosméticas
Hemos visto ya unas cuantas virtudes del hipérico pero no queda todo ahí, ya que su aceite es un elixir para la piel, excelente para el cuidado del cutis.
Se utiliza frecuentemente en la elaboración de mascarillas y en el tratamiento del acné ya que contribuye en reducir la producción excesiva de grasa y ayuda a cicatrizar los barros que se producen consecuencia del acné, al mismo tiempo que evita infecciones.
En el caso de la psoriasis, el aceite de hipérico es un gran remedio para tratar y curar las heridas de la psoriasis ya que además de sus propiedades antiinflamatorias, analgésicas y antibióticas, posee propiedades apoptópicas, que estimulan la muerte natural de las células dañadas.
Con el acné, os recomiendo probar el aceite vegetal de hipérico mezclado con aceite rosa mosqueta ya que aumentará considerablemente su eficacia.
En cuanto a la salud capilar, ya sea en infusión o aceite, el hipérico combate la fragilidad capilar, gracias a su alto contenido en flavonoides.
Otras propiedades del hipérico
Además de su eficacia como tratamiento para la depresión y como tónico nervioso, el hipérico es un excelente:
- Digestivo: Ante la acidez gástrica y sobre todo en el tratamiento de úlceras de estómago, diarreas y vómitos.
- Analgésico: Excelente remedio para tratar dolores corporales como aquellos consecuencia de afecciones reumáticas (gota, artritis, ciática, lumbalgias…).
- Fibromialgia: Cada vez se utilizan más los extractos naturales de hiperico en el tratamiento de la fibromialgia.
- Bruxismo: Conocido también como el rechinar de dientes, afección causada por motivos tensionales, el bruxismo encuentra en el hipérico un excelente tratamiento para las personas que lo sufren ya que libera la tensión que lo causa, siendo a día de hoy una de las plantas más utilizadas en su tratamiento.
- Enuresis: La enuresis o incontinencia infantil puede encontrar en esta planta un buen aliado, de la misma forma que sucede con el bruxismo.
- Menstruación: Ayuda a disminuir las menstruaciones muy abundantes y curiosamente, también favorece aquellas menstruaciones con un sangrado escaso. Al mismo tiempo, también reduce los síntomas depresivos relacionados con los cambios hormonales que se producen en la menstruación o por el síndrome premenstrual.
- Hemorroides: Excelente remedio tradicional para el tratamiento de las hemorroides.
- Obesidad: Aunque todavía hacen falta más estudios, de momento, se ha podido observar que el extracto de hipérico puede mejorar la resistencia a la insulina.
- Varices: Los taninos presentes en esta planta, junto sus propiedades calmantes y relajantes, contribuyen en mejorar problemas periféricos circulatorios como son las varices.
- Sedante: Calma los nervios y evita sus efectos secundarios en el organismo como son palpitaciones, espasmos, dolores indeterminados…
Composición del Hipérico
¿De dónde surge la magia del hipérico? La respuesta la encontramos en su composición:
- Hipericinas: los preparados de hipérico deben contener al menos un 0.08% de hipericinas.
- Hiperforina (derivados floroglucinólicos).
- Flavonoides: glicósidos de quercitina (hipersódido, isoquercitrina, quercitrina, amentoflavonas).
- Taninos: se encuentran especialmente en la flor (proantocianidinas o procianidinas).
- Aceites Esenciales: se localiza en las partes aéreas y su concentración puede variar dependiendo de la época en que se cosecha.
- Ácido clorogénico, ácido cafeoilquínico y ácido cumaroilquínico (antioxidante).
- Minerales: cadmio y plomo (en las hojas)
- Ácido ascórbico, palmítico y esteárico.
Dosificación del hipérico
Los efectos del hipérico, como la mayoría de plantas medicinales, tardan entre 10-15 días en hacerse notar a diferencia de los fármacos de síntesis que ofrecen un efecto mucho más inmediato.
Una vez iniciado su consumo, éste no se debe prolongar por más de 6 semanas. Si pasado un mes (4 semanas) no se aprecia mejoría se debe consultar con el médico.
Por lo general, el hipérico en infusiones, no se recomienda tomar más de 2gr por infusión. No se deben sobrepasar los 6 gramos diarios.
En suplementos alimenticios o extractos naturales, se recomienda una administración entre 300-1000mg/día.
Para el tratamiento de la depresión, ansiedad u otros síntomas relacionados, podemos tomar hipérico de tres formas diferentes:
- Infusiones de hipérico: no se debe superar la dosis de 2-4gr al día.
- Tintura madre de hipérico o extractos fluidos: 10-30 gotas tres veces al día, aunque se recomienda seguir las instrucciones del prospecto ya que la dosis puede variar dependiendo del tipo de extracto.
- Comprimidos o cápsulas de hipérico: se suelen recomendar dosis diarias entre 300-1200mg, aunque debemos seguir las indicaciones del prospecto del producto adquirido.
¿Cómo preparar el aceite de hipérico?
Si tienes la suerte de vivir en una zona donde el hipérico abunda puedes preparar tú mismo tus aceites vegetales de hipérico.
Es importante que recojas la cantidad de la planta que vas a utilizar, no más. Recuerda que respetar el medio natural es importante y no debemos abusar de lo que nos ofrece la naturaleza.
Para elaborar tu aceite de hipérico:
- Coge unos 100gr de hojas frescas de hipérico
- Tritúralas bien con la ayuda de un mortero
- Déjalas macerar en un aceite base (oliva, almendras…), en un recipiente de vidrio que quede herméticamente cerrado.
- Guarda el frasco reposar en un armario. Ha de estar resguardado de la luz del sol, durante un periodo de 6 semanas.
- Ir removiendo durante este periodo para que se mezcle bien el contenido.
- Seguidamente se expone a la luz solar hasta que adquiera un color rojo rubí.
- Finalmente se filtra y se exprime bien.
Y así ya tienes en casa, un estupendo remedio para utilizar en caso de heridas, úlceras o quemaduras.
Toxicidad del hipérico
El hipérico posee una actividad fotosensibilizante. Concretamente la hipericina es un potente agente fototóxico. De ahí, que se hable tanto de la incompatibilidad del hipérico con el sol.
La exposición al sol de las zonas tratadas con aceite, cremas o ungüentos de hipérico, puede ocasionar quemaduras en la piel u otras afecciones (irritación, rojeces…).
Estos trastornos en la piel se vienen observando desde la antigüedad, sobre todo en animales que habían consumido la planta tras una exposición solar. En los casos más graves, pueden aparecer convulsiones epilépticas, crisis hemolíticas e incluso la muerte del animal.
Debido a esta fotosensibilización, también pueden surgir trastornos hepáticos e ictericia, al mismo tiempo que partes de la piel poco pigmentadas pueden necrosarse o incluso desprenderse dando lugar a cicatrices cuya curación es muy lenta.
En el caso de las personas que hayan consumido esta planta y que se expongan al sol posteriormente, puede aparecer una pigmentación discreta de la piel (eritemas) o prúrito. En ocasiones, esto no queda en una pequeña lesión cutánea, sino que pueden llegar a aparecer ulceraciones profundas.
¿Quién NO debe tomar hipérico?
- Mujeres embarazadas o en periodo de lactancia.
- Personas que estén siguiendo algún tratamiento farmacológico. En este caso, nunca se debe tomar si no es bajo supervisión médica.
- Ya sea por vía externa o interna, las personas que consuman hipérico no deben realizar exposiciones solares prolongadas y evitarlas a toda costa, sobre todo en alta montaña y mediante lámparas de rayos UVA.
Interacciones del Hipérico
La AEMPS (Agencia Española del Medicamento) considera necesario advertir que los productos que incluyen en su composición hipérico tienen la capacidad de interaccionar con otros fármacos, incluídos ciclosporina, digoxina, anticonceptivos orales, teofilina y warfarina.
En consecuencia estas interacciones pueden provocar una disminución de las concentraciones plasmáticas y pérdida del efecto terapéutico de los medicamentos mencionados.
Debido al mecanismo de estos fármacos, el dejar de administrar productos que contienen hipérico también puede causar un aumento de los niveles sanguíneos con la consiguiente aparición de toxicidad, especialmente en aquellos medicamentos que tienen un estrecho margen terapéutico como la ciclosporina, digoxina, teofilina y warfarina.
Un estudio reciente realizado por The National Institutes of Health sobre la interacción entre el hipérico y el principio activo indinavir (Marca Crixivan, indicado en el tratamiento del VIH-1), publicado en la revista The Lancet, demuestra que la administración de hipérico reduce de forma significativa las concentraciones plasmáticas de indinavir. Esto quiere decir que estos pacientes, si no alcanzan las concentraciones plasmáticas terapéuticas de indinavir, pueden desarrollar resistencias y falta de eficacia del tratamiento.
Si usas hipérico, NO tomes otros fármacos a menos que sea bajo supervisión médica.
En el caso de la depresión, los estudios revelaron ciertas reacciones adversas de la hierba de San Juan muy similares a las reportadas con el antidepresivo fluoxetina, más conocido como Prozac. De hecho, solo en Australia se realizaron 84 informes entre los años 2000 y 2013 sobre las reacciones adversas de la hierba de San Juan y 447 informes sobre el Prozac.
Además, puede interactuar con otros antidepresivos. Se cree que aumenta los niveles de serotonina, por lo que combinar esta planta con este tipo de fármacos, aumenta el riesgo de tener excesos de serotonina, cuyos síntomas incluyen confusión, temblores, diarrea y un descenso de la temperatura corporal.
Estos efectos secundarios incluyen ansiedad, ataques de pánico, mareo, naúseas y aumentos marcados en la presión arterial.
Las personas con trastorno bipolar no deben consumir hipérico ya que puede fomentar un episodio maníaco. También puede reducir el efecto de las pastillas anticonceptivas, los anticoagulantes y los fármacos para enfermedades cardiovasculares, junto con algunos medicamentos indicados en el tratamiento del VIH y del cáncer.
Con esto queremos decir que aunque el hipérico resulte efectivo en caso de depresión leve a moderada, también hay un riesgo de sufrir efectos secundarios y como decimos siempre, el hecho de que en el frasco diga «natural», debemos tener en cuenta de que en la composición hay ingredientes que son activos en el organismo y sus efectos secundarios no se describen porque los suplementos alimenticios no están regulados de la misma forma que los medicamentos.
Fuentes:
Clinical and Experimental Pharmacology and Physiology.
University of Maryland School of Medicine,
National Institutes of Health
Botanicalonline.com
A.Vogel Laboratorios